Fenómenos inexplicables: telepatía, intuiciones, sueños...

Sergio, estoy de acuerdo en que no conocemos la estructura última de lo real. Aunque encontremos una "solución" científica, empírica, demostrable y concienzuda, no sabemos si esa es el final del misterio, es decir, hemos encontrado una solución al misterio, vale, pero es esa la verdadera solución? no hay nada más allá de esa única solución? si seguimos indagando podríamos dar con más soluciones? y si ese misterio pertenece a un todo más grande? Cuándo debemos dejar de buscar? cuándo hemos llegado a la VERDAD?

una_que_andaba_por_aquí, conoces el proyecto Conciencia Global? Creo que te puede interesar este video (podéis ignorar que es de Cuarto Milenio XD):



Según esto, si la mente humana puede ser registrada por máquinas, tendría sentido que una mente humana "registrara" a otra mente humana y viceversa...

La telekinesis no es una mera ilusión de la mente?

Elisewin, te pasa esto con gente cercana, eso tiene que significar algo... a mí me ha pasado algo parecido con una persona a la que parece que me quedé mentalmente unida... no sé cómo ocurrió pero supe que su padre había tenido problemas de salud y también que había estado trabajando en un lugar concreto (sentí como si me mirara cuando pasé por allí). Aunque esto último sí que podría ser "feromonal" XD

Alguién quiere mover este hilo de sitio? Se puede mover ya empezado o hay que reiniciar?

Se me acaban de ocurrir un par de ideas más:

1. Podrían las denominadas "pseudociencias" convertirse en el próximo nicho de mercado global a explotar?

2. Podemos considerar internet una Conciencia Global Artificial y el primer paso experimental hacia una Conciencia Global Humana que pueda ser explotada de la misma manera que lo ha sido internet?

Sergio Fisch escribió: Fue después de ver un capítulo de la serie Cosmos, de Carl Sagan, que mi madre se puso a experimentar con eso de hacer girar móviles de papel con la mente. Ella lo logró, ¡siempre! Yo no.

Ese es mi sueño desde que vi Matilda.

Me indujo a leer, pero ese no era el plan.

Curiosamente tuve un sueño hace tres días en el que teniendo la misma sensación que tengo de sinestesia visual, movía los objetos with the mirada.

(esto me encanta, de hecho pensé en crear una página en facebook pa que la gente publicase sus casualidades... pero ya no)

Por cierto, Elisewin, ponía por ahí, en lo de neuronas espejo, que dos personas que se conocen musho musho, terminan actuando la una como la otra, y la conexión emocional es aún mayor.

O sea, que lo que le ocurre al uno le está ocurriendo al otro, ¿literalmente?. Hum, supongo que es tal cual. Literalmente, te ocurre lo que le ocurre al otro. La diferencia estriba en tenerle delante, o tenerle en un extremo no visible. En la primera, imagino que puedes indicar que su comunicación te indica lo que hay. El problema de esto es que casi todo aquello te pasa desapercibido, solo te entra, o sea, lo entiendes.

Obviamente, at the time, anda ocurriendo todo. Percibirlo, bueno, es más cosa de estar tranquilo ante esto.

Aquí había argo del asunto...
http://adultosuperdotado.foroactivo.com/t1729-profecias-autocumplidas

oh-là-là! escribió:Se me acaban de ocurrir un par de ideas más:

1. Podrían las denominadas "pseudociencias" convertirse en el próximo nicho de mercado global a explotar?

2. Podemos considerar internet una Conciencia Global Artificial y el primer paso experimental hacia una Conciencia Global Humana que pueda ser explotada de la misma manera que lo ha sido internet?

Bueno, en la segunda, ya lo están haciendo, ¿no?

http://www.20minutos.es/noticia/1522637/0/google/cerebro-artificial/gatos/
(ya sé, es el veinte minutos y no es ná fiable, también andaba en el IyC, pero ahora mismo, a lo rápido)

Hola Yves!

No me refería exactamente a eso... en vez de crear un cerebro artificial casi humano (que es lo que sugiere el artículo) sería más parecido a programar los mentes humanas de forma que quedasen conscientemente conectados...

No sé cómo se podría hacer, quizá en las escuelas nos enseñasen, en vez de conocimientos puros y duros, a conectarnos a la conciencia global o a otra mente (de la misma manera que ahora nos conectamos a internet mediante un ordenador),

Conexión ordenador - ordenador = conexión mente - mente
Conexión ordenador - internet = conexión mente - conciencia global

pero sería en todo caso con cerebros 100% humanos ... no sé si me he explicado XD

Ah, vale. :D

La verdad es que eres la mar de entretenida.

Pues internet funciona de forma equivalente. Lo que pasa que quieres que funcionemos sin tecnology. O al menos si es tecnología, que sea integrada.

Miratú. Si de niños venimos con esas cosas de serie. Que decía por ahí una_que_andaba_por_aquí que si se les enseñasen desde pequeñitos la física cuántica, maravilla asegurá.

Yo apuesto por los fractales. Que nunca tiré de matemática euclídea, y por eso fueron mazo intuitivos. Yo desde nenes. Asín, en las paredes de casa, el fenómeno de la discreción. Y cuando pregunten: oye mami, ¿todo cabe entre dos dedos? les diré que sí, y les enseñaré en el espejo que ellos mismos caben entre sus dedos...

Luego de ahí a estar conectaos, poca cosa.

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De todas maneras tú echale vistazo a lo del LSD. Que a lo mejor por ahí...

Probaré lo del LSD, espero que no me pille el subidónsubidónnn en el baño! ajajajjaja chauuuu :bball:

oh-là-là! hauxe bai dela aurkezpen interesgarria!
A ver, Sergio, sin hacer uso del traductor de Google, ¿Adivinas lo que he puesto (telepatia in side)?

Elisewin escribió:A mi me interesa mucho este tema. Pero no son cosas que me pasen con cualquier persona. Me ha pasado con mi hermana, con mi madre (al punto de lo increíble)... y con mi ex. Nunca con mi marido, por ejemplo. Y no son cosas que me gusta contar porque la gente habitualmente se me ríe en la cara. (...) Ah. Para la telekinesis todavía me falta. :D

Lo que contás me pasó muchas veces, y la verdad que es traumático, o al menos muy inquietante y desestabilizador. Pero no sólo me pasa con gente cercana, sino también con completos desconocidos. En la calle, a veces, me cruzo con alguien y me detengo a su paso, diciéndome a mí mismo: "Pero qué persona tan especial", o "Qué buena persona, podría ser alguien querido por mí desde siempre", etc. Estas empatías espontáneas e inexplicables son extremadamente comunes en mi vida. Y no necesariamente el desconocido (mujer, hombre, joven, viejo: eso no importa) tiene por qué sentir algo o enterarse de nada, aunque puede pasar.

Por supuesto, me ha pasado este tipo de cosas, pero mil veces más intensas y misteriosas, con chicas, durante mi juventud (a los 46 ya no me considero "joven"  ). Un caso grave me ocurrió (¿o nos ocurrió?) en la facultad, en mi época de estudiante universitario. Me enamoré de una chica a la que no conocía de nada. No es el típico y vulgar caso de amor a primera vista, que es el amor "que entra por los ojos", como se dice en Romeo y Julieta respecto al amor juvenil o inmaduro. De hecho, la primera vez que la vi, ella no me gustó demasiado. Bueno, la cosa es que se creó una conexión fantasma con esta chica (cuyo nombre sube sin saber cómo). Nunca cursamos juntos, ni cambiamos una palabra.
Eramos de clanes distintos, y no había amigos en común. Pues bien, esta conexión me permitía detectar cuándo llegaba ella a la facultad (¿y viceversa?). Prescindiendo de los sentidos normales, debo subrayar. Y esta conexión, como dije, era recíproca, pero no puedo asegurarlo al 100%. Me baso en ciertos episodios sugestivos. Por ejemplo, una vez yo estaba sentado en los peldaños de la escalera que iba de planta baja al primer piso. Esta escalera estaba rodeada de gruesas paredes, de modo que sólo se desplegaba ante ella un panorama frontal (el hall de entrada). A ambos lados, paredes y pancartas políticas. En esa escalera yo repasaba un texto de estudio, y cada tanto levantaba la cabeza y miraba hacia el hall de entrada, porque esperaba a una amiga. De pronto, alguien sube corriendo por la escalera, pero viniendo de un costado (del interior de la facultad). Esta persona no pudo haberme visto desde el lugar en que estaba antes. Sube proveniente de la nada, y viene hacia mí como si tratase de alguien que me ve todos los días y que se alegra mucho de encontrarme. Yo, pasmado, pero también maravillado, porque era ella. Pero cuando estamos frente a frente, ella despierta como de un sueño, se le va la sonrisa amorosa y adopta una expresión de sorpresa y confusión. Nos quedamos en silencio, estupefactos. Y entonces, sin mediar palabra, ella vuelve sobre sus pasos, como si se hubiera equivocado de dirección en su búsqueda de no sé qué.

Pero toda la vida los abanderados del sentido común me "solucionaron" estos enigmas con argumentos como éstos: Mera casualidad. Una feliz coincidencia (nunca sé qué significa "coincidencia", y creo que ellos tampoco). Hormonas (¡!). Olores corporales. Ilusión del deseo. Un simple malentendido a lo Paul Auster...

Por supuesto, yo no hago caso a todo eso. Y anécdotas como ésa tengo un montón, algunas como sacadas de un manual de parapsicología.

izurdesorkunde escribió:oh-là-là! hauxe bai dela aurkezpen interesgarria!
A ver, Sergio, sin hacer uso del traductor de Google, ¿Adivinas lo que he puesto (telepatia in side)?

Perdón, pero sólo tomé dos lecciones de suajili... Y las cuatro o seis palabras que conocía de ese idioma (spin, horizonte de eventos, quark, etc.) perdieron todo significado para mí. Por otra parte, mis servicios de telépata no son gratuitos. Te paso el sitio donde podés llenar un formulario de contratación y pagarme con TruchoPal:

"http://manochanta.com/estafas/formulario-victima"

Lo que sí puedo hacerte es un descuento.

   

Sergio Fisch escribió:
Lo que contás me pasó muchas veces, y la verdad que es traumático, o al menos muy inquietante y desestabilizador. Pero no sólo me pasa con gente cercana, sino también con completos desconocidos. En la calle, a veces, me cruzo con alguien y me detengo a su paso, diciéndome a mí mismo: "Pero qué persona tan especial", o "Qué buena persona, podría ser alguien querido por mí desde siempre", etc. Estas empatías espontáneas e inexplicables son extremadamente comunes en mi vida. Y no necesariamente el desconocido (mujer, hombre, joven, viejo: eso no importa) tiene por qué sentir algo o enterarse de nada, aunque puede pasar.

Para mi a veces es traumático. Y ahora que lo mencionas, con desconocidos me pasa también eso de tener empatías inexplicables. Claro que el otro generalmente sigue de largo, ídem... Otras veces se generan relaciones que parecen mágicas.

También me parece que con desconocidos con quienes no establezco luego ninguna relación no puedo corroborar lo que siento, lo que percibo. Posiblemente sí me "pase algo" pero ¿cómo corroborarlo? Con las personas conocidas puedo preguntar si percibo algo así como lo que conté.

Particularmente creo que bloqueé estas cosas por mucho tiempo, porque cuando terminamos aquella relación fue extremadamente doloroso y la única forma de protegerme fue bloqueando todo con esas explicaciones racionales hasta que me autoconvencí de que todo lo que "percibía" "era una pavada proveniente de mi imaginación" y cuando lo volví a "abrir" hace ya casi cuatro años, me di cuenta de que es algo que no puedo negar y muy difícilmente controlar. Ahora me vuelve a pasar con más gente y simplemente lo tomo como algo natural, como dije antes, conecto y disfruto.

Eso que contaste de la chica me puso la piel de gallina.

Te cuento otra anécdota, Elisewin, que hasta a mí me produce piel de gallina (¡de ñandú, más bien!).

Esto me pasó no hace muchos meses. No se lo conté a nadie, porque estoy cansado de las explicaciones que apelan a lo obvio (trampas del inconsciente, deseos reprimidos, ilusión, azar, etc.).

Desperté un día con un recuerdo refrescado durante el sueño. Los sueños muchas veces nos actualizan partes olvidadas o semi-olvidadas de nuestras vidas. Nos traen a la memoria zonas raras del pasado, no necesariamente negativas o dolorosas. Al despertar, uno se da cuenta de que ha estado soñando con ciertos días pasados, que ahora, mientras nos desperezamos y bostezamos, quedan en manos de la vigilia, a cargo de la consciencia, para que ésta los pueda repasar tranquilamente y así poder restituir la continuidad de nuestro destino, atar cabos sueltos, etc.

Pues bien, a mí me pasó algo así hace poco, pero que sólo concuerda con esa clase de remembranzas oníricas en lo fenoménico (perdón por usar ese tipo de palabrejas). Tuvo todas las apariencias de ser uno más de esos caprichos de la memoria y del sueño, pero... Hay algo más, aunque no sé qué.

Fue así: Desperté con una época completa de mi vida traída a la consciencia. Esa época olvidada estaba centrada en una chica. Una chica que me era perfectamente familiar, pero no amada por mí. Era una novia, una amante, alguien importante para mí, pero yo no la amaba. Delgada, seria, pelo castaño obscuro, una "muñequita" (yo me entiendo), con un lunar sobre el labio superior, a la derecha. Ojos marrones, ni inteligentes ni tontos, pero severos, de mirada decidida. Un metro sesenta y cinco de estatura. Una cara que podría ser hermosa si sus rasgos no fueran tan rígidos. Pelo corto, de peluquería. Vestimenta "concheta". Las escenas con ella eran varias, y absolutamente anodinas: nosotros comprando en un supermercado, hablando en voz baja pero sin demasiada pasión, haciendo planes, habitando no sé qué hogar, etc.

Al despertar con toda esta "carga", nada me extrañó: era como tener en mente cualquier episodio de mi vida oficial. Como lo más natural y cotidiano del mundo: "Ah sí, aquella novia que tuve, sí..." Sentí lo que se siente al recordar algo semiolvidado, algo importante que hacía mucho no repasaba con la memoria. Reconocí a la chica, reconocí "aquellos días", etc. Lo normal en este tipo de remembranzas inesperadas...

Pero he aquí que al levantarme de la cama, me tuve que volver a sentar. Debido al shock.

Yo no conocía a esa chica, de ningún lado, en absoluto. Nada de todo eso encajaba en mi vida. No había en mi pasado el menor hueco donde meter esa época. No encastraba ni a los golpes. ¡Imposible! Y sin embargo...

Sin embargo, todo eso era un recuerdo con todas las de la ley. Se presentó como un recuerdo con las mismas credenciales que cualquier otro. Sólo que había un problemita: Era un eslabón que no enlazaba con la cadena de mi vida. Era como un eslabón (igual a los demás, en todo) que pertenecía a otra cadena biográfica, en la que yo también estaba inserto como personaje, tal como constaba en las escenas que "volvieron" a mi mente, al despertar. Un eslabón perdido, pero de mi propia evolución.

Ese "recuerdo" no se extinguió. Sigue ahí. Todavía no encuentro nada en mi vida que lo explique. Preguntas como ¿No habrá sido aquella chica, la de tal o cual ocasión, que me quedó grabada...? Ese tipo de dudas las tengo, claro, pero no: Nada concuerda.

Sí que pasan cosas raras en la vida...

Izurdesorkunde! Eskerrik asko zuei denori horrelako ongi etorri beroagatik! Aspaldian irakurri nuen zure postetako batean euskalduna zinela! Asko pozten nau ni bezalako jendea nire inguruan ere badagoela jakiteak!  

Sergio, crees que esta experiencia pertenece a una vida paralela, a una vida pasada, a una vida futura... en el sueño tú eras tú mismo tal cual eres ahora?

Aseguras que es un recuerdo con todas las de la ley, un recuerdo REAL, podría ser si consideramos que el tiempo no es lineal. No podría ser una interpretación subconsciente de alguna situación que estés viviendo en la actualidad y que tu mente te la representa en forma de sueño para que captes el mensaje subyacente y lo puedas aplicar a esa situación actual? (me imagino que esto ya lo has descartado, porque dices que había algo más...)

Otra pregunta, creeis en la reencarnación? en el tiempo cíclico?



Cual de estas teorías sería la que más se acercase a tu experiencia?

Bien, siguiendo con el tema. Hay veces en las que despiertas del sueño con una sensación "extraña" de la que no quieres "despegarte" (por lo "extrañamente agradable" aunque no haya razones objetivas para sentirlo así) a pesar de saber que con los primeros rayos de la consciencia inevitablemente se desvanecerá. Intentas aferrarte al estado de sueño, pero es inútil ya. No me es posible describirlo con palabras. Además es una sensación pocas veces sentida. En esas muy contadas experiencias no me autopercibo como mujer. No como me percibo en los sueños "habituales". Supongo que nadie habrá sentido algo así, aunque no es algo que se cuente habitualmente en las charlas banales de la vida social estándar, máxime cuando no encuentras palabras para describirlo.

En cuanto a "ver" a perfectos desconocidos en mis sueños, es bastante habitual, pero hay veces en las que, por alguna razón, se te queda grabado alguno en particular. Pero no recuerdo sus caras con el nivel de detalle que describes, y a lo sumo lo que mi patética memoria conserva son sensaciones, vagas impresiones.

izurdesorkunde escribió:Bien, siguiendo con el tema. Hay veces en las que despiertas del sueño con una sensación "extraña" de la que no quieres "despegarte" (por lo "extrañamente  agradable" aunque no haya razones objetivas para sentirlo así) a pesar de saber que con los primeros rayos de la consciencia inevitablemente se desvanecerá. Intentas aferrarte al estado de sueño, pero es inútil ya. No me es posible describirlo con palabras. Además es una sensación pocas veces sentida. En esas muy contadas experiencias no me autopercibo como mujer. No como me percibo en los sueños "habituales". Supongo que nadie habrá sentido algo así, aunque no es algo que se cuente habitualmente en las charlas banales de la vida social estándar, máxime cuando no encuentras palabras para describirlo.

En cuanto a "ver" a perfectos desconocidos en mis sueños, es bastante habitual, pero hay veces en las que, por alguna razón, se te queda grabado alguno en particular. Pero no recuerdo sus caras con el nivel de detalle que describes, y a lo sumo lo que mi patética memoria conserva son sensaciones, vagas impresiones.

¿A que te refieres con que no te sientes mujer ? 

Yo cuando sueño con desconocidos, normalmente no tienen cara, no es que sea nada exotérico, un poco como ízurde
Personalmente me fascinan los mosntruos que en muy pocas ocasiones crea mi mente enajenada, si bien suelen ser pesadillas en las cuales los bichos estan envueltos en misterio o me ponen en autenticos aprietos , luego me levanto y me fascino de mi mismo.

A que no me "siento" como soy aquí y ahora. No me siento como en los sueños habituales. De ser algo sería más hombre que mujer... pero tampoco.
Los desconocidos SI tienen rostro, es mi memoria la que los desdibuja con el tiempo. Hoy en dia si viera el rostro de aquella persona con la que conversé en las gradas de aquella plaza de pueblo preparada para la feria taurina no le reconocería. Si lo hubiera visto el mismo dia que lo soñé, habría dado un respingo, porque la imagen estaba fresca entonces.

En mi "sueño" (notar las comillas), era yo quien vivía junto a la chica. No era otro tipo. Y era yo muchos años atrás. Y la chica era una perfecta desconocida después del sueño (y con esto quiero decir: después de ese largo interregno entre el despertar y la vigilia plena). Durante el sueño y durante todo el rato que estuve desperezándome y bostezando, ella era un ser extremadamente conocido, entrañable, inseparable de mi vida. Ahí está el punto.

Y acá el inconsciente no juega ningún papel, puesto que ese episodio está fuera de lo Simbólico (para usar un término de la escuela francesa). No puedo asociar nada con él. Intento analizarlo (no olviden que yo estudié psicoanálisis y hasta llegué a "analizar" a otros), pero no hay caso: no tiene ninguna ligadura con ningún "fantasma" ni "complejo", ni hay represión ni angustia detrás de esto. No hay metonimia ni metáfora acá. Es un hecho (mucho más que un hecho: es una pequeña biografía) apócrifo insertado en mi biografía oficial.

Un tumor o alguna enfermedad degenerativa que afectaran al cerebro muy bien puede alterar la memoria, la mente completa, y hacerla generar falsos recuerdos que en nada se distinguen del resto en cuanto a la apariencia de veracidad. Eso se sabe, pero yo consulté y no se trata de eso: mi mente no fue alterada, ni mi memoria, puesto que ambas siguen intactas y no he vuelto a experimentar cosas así. Fue un episodio aislado, sin precedentes ni consecuencias, y no estuvo rodeado de las  sintomatologías propias de las patologías neuronales.

¿Que qué creo acerca de esta clase de fenómenos? ¿Que si creo en las vidas pasadas?

Hablar de vidas pasadas es también hablar de vidas futuras: el Más Allá. Pero el eje en que eso sucede o se cree que sucede es el del tiempo, la "flecha". ¿Y qué pasa si cambiamos de eje? ¿Y si giramos 90º?

Podríamos hablar de vidas paralelas. ¿Por qué creer que nuestro universo real, palpable, comprobable, es hermético, o único? Ni en física se sostiene la idea de un espacio autosuficiente. Hay otras dimensiones (cada vez se especula con más), hay materia venida de no se sabe dónde, hay agujeros negros, hay o podría haber agujeros de gusano. Hay indeterminación y superposición de estados. Hay gatos que están vivos y muertos a la vez, depende de cuándo se los observe. Y hay fotones que son dos y uno a la vez, pero opuestos; fotones que están a gran distancia uno del otro, pero contactan entre sí. Hay una velocidad insuperable (la de la luz) que es superada constantemente. Y hay partículas subatómicas que retroceden en el tiempo, porque así las cosas les resultan más cómodas.

¿Y se supone que la mente humana, nuestro espíritu, es más simple que, por ejemplo, lo que ocurre en un colisionador de hadrones? ¿Se espera que creamos que somos más evidentes y predecibles que el gato de Schrödinger?

Mañana postearé ciertas experiencias raras vividas por el escritor Mario Levrero. Yo tengo más anécdotas propias, pero prefiero dejar mi Materia Obscura un poca tranquila...

Cuento un fenómeno inexplicable muy cercano:

En el living de casa hay un ventanuco vertical de vidrio esmerilado, o sea traslúcido, que da al patio; o más precisamente, a la puerta de entrada. A su vez, al costado de esa puerta sube una escalera, hacia la terraza y el piso superior. Si alguien quiere subir a la terraza entrando de la calle, pasará sí o sí frente al ventanuco vertical. Y su figura se traslucirá para quien esté en el living mirando en dirección al ventanuco.

Pues bien, muchísimas veces, por la noche, se ha visto pasar a alguien frente a ese ventanuco, rumbo ¿a la terraza? Esta persona iba siempre vestida con ropa muy clara, todo indica que blanca. Y su talla era menuda, como el de una mujer delgada. Cuando no era vista por uno solo, era vista por varios testigos. Yo la vi pasar varias veces.

Pero las veces que hemos "seguido" a esta persona en su trayectoria a la terraza (mirando la escalera desde otros ventanucos), la hemos perdido de vista. Esto siempre sucedió de noche, alrededor de las 10-11 Hs. Y en ningún caso pudimos rastrear su presencia más allá de su paso frente al ventanuco.

Recuerdo una vez en que la curiosidad (o el hartazgo) me cansó, y salí corriendo al patio apenas pasó frente al ventanuco esta presencia blanca. Yo llevaba un cuchillo en la mano, dispuesto a dar pelea (no descartábamos que sea un ladrón). Pero cuando salí, no había nada. Todo estaba en calma.

A esa aparición la apodamos "el fantasma". Y, medio en broma, medio en serio, la asociamos a otros hechos fantasmales sin explicación racional que, curiosamente, se dan siempre en la misma época en que esta figura pasa frente al ventanuco. O sea: si un fenómeno hace tiempo que no ocurre, los otros tampoco.

Estos otros hechos son bastante preocupantes: Objetos que desaparecen, o que aparecen en posiciones extrañas. Un voz de mujer que llama a alguien. Todo esto genera discusiones entre los habitantes de la casa (somos muchos, la casa es grande), pero ya hay consenso por fin: es el fantasma, nos decimos. Y siempre medio en serio, medio en broma.

Una vez yo me estaba bañando, en la planta alta. Escucho que mi tía, una mujer mayor, me dice algo a la puerta del baño. Yo no oía bien, debido al ruido de la ducha. Así que le grité que ya iba, que esperara. Me pareció raro que mi tía subiera a la planta alta, porque eso no lo hace casi nunca; así que temí que fuera una emergencia que requería de mi presencia. Terminé de bañarme a las apuradas y salí. Como ella no estaba, bajé las escaleras corriendo, en su busca. Abajo, estaba la familia más o menos reunida, como de costumbre, y en completa calma. No había ninguna emergencia a la vista. Pero he aquí que cuando le pregunto a mi tía para qué me había llamado, se quedó dura, sin comprender la pregunta. Ella no me había llamado para nada. No entendía de qué le estaba hablando. Ni los demás.

¿Alucinación psicótica? No. Porque las alucinaciones psicóticas hacen signo, como se dice. No puedo explicar acá lo que significa una alucinación psicótica, pero no: no era nada de eso. ¿Un tumor que me hizo oír voces? Tampoco. Simplemente fue una voz femenina que me gritó no sé qué a la puerta del baño, varias veces, mientras yo me duchaba. No se volvió a repetir eso.

Una vuelta desaparecieron todos los cuchillos de la casa. Nunca aparecieron. Otra vez, todas mis medias, pero sólo una media de cada par. Me quedé con todas medias sueltas, sin par.

Cosas así de locas. Lo peor no lo cuento porque no quiero remover cosas dolorosas para mi familia y yo.

Yves escribió:Joder Sergio... no hay tu tía contigo, de verdad.

Acabo de contar una anécdota donde mi tía figura como protagonista secundaria, Yves. Sí que hay mi tía conmigo.  

vale, me ha hecho gracia.

pero sigo cabreada.

y sigo por gusto.

Listo, hilo dividido: http://adultosuperdotado.foroactivo.com/t2960-que-es-la-luna-en-si-misma

Spoiler:

Sergio, en mi familia también hay historias de familiares que han visto/ven o casi casi conviven con fantasmas... personalmente creo que en este caso no se trata de un fantasma en el sentido de "aparición fantasmagórica" cuya sombra ves pasar o cuya voz oyes sin poder identificar de dónde viene como ocurre en tu casa, si no que es la propia mente de esta persona la que está propiciando la aparición para intentar hacerle ver de una manera muy sugestiva los cambios urgentes que necesita hacer en su vida. Y no, no está tomando ningún tipo de psicotrópico XD de hecho probablemente tenga una enfermedad psiquiátrica severa, pero se ha negado de pleno a ver a un psiquiatra.

Lo que quiero decir es: existen un número indeterminado de fénomenos sin explicación racional, ¿puede ser la mente humana en toda su inmensidad la causante de todos ellos? ¿de algunos sí pero de otros no? 

¿No sería más interesante intentar explicar estos fenómenos desde una perspectiva biológica?

No sé por qué insinuás, oh-là-là!, que mi caso podría explicarse psiquiátricamente. Yo estoy perfectamente, la verdad. Para que todos vean que no miento y que estoy completamente en mis cabales:

Desplegar para verme:

Hum... Tus comentarios me han dado hambre. Creo que saldré a pasear un rato...